Mirarnos desde el mar.

Manuel Bagnara Vivanco

Gerente General

ARMASUR A.G.

Para los que salimos del colegio hace varios años atrás, Chile nos fue enseñado, como una larga y angosta faja con una distribución en regiones. El mar, era un complemento. Un mundo que salía a la palestra especialmente durante el mes de mayo, en que el Combate Naval de Iquique y los recortes de los peces que sacábamos de revistas y diarios que nos guardaban en casa, colocándolos en cartulinas de color que adornaban nuestra sala con una fiesta de color, nos recordaban que el océano es importante.

Gracias a la inmediatez de la tecnología, nuestros hijos y nietos han incorporado en su aprendizaje, que el mar es un ecosistema del cual todos formamos parte y que no está separado del resto de Chile. Es Chile también.

Detente un instante a pensar cómo influye el mar en la vida. Es como lo ha dicho en pocas palabras pero muy claramente Noemí Manríquez, nuestra querida Niña Planeta: “el pulmón del mundo” con especies marinas que desempeñan una función indispensable en el equilibrio natural. El mar proporciona casi todo el oxígeno de la Tierra, moderando además el clima de esta última. De él extraemos comida, recursos minerales, energéticos y materia prima para medicamentos y cosmética. Es un espacio de seguridad nacional; una carretera que transporta bienes, personas e historias que sostienen no sólo la economía sino también el orgullo de ser chilenos; con los distintos actores vinculados con el borde costero, entre ellos los pueblos originarios, los pescadores artesanales y las miles de familias que hacen su vida en él, para trabajar y donde sus hijos proyectan tener mejores oportunidades integrando las tripulaciones que constituyen el motor de la marina mercante que constituye en muchos casos el único puente de conexión con el resto de Chile continental.

Por todo esto, es bueno mirarnos desde el mar. Y cuidarlo. Es necesario y urgente contar con las garantías jurídicas también, que ayuden a que este esfuerzo personal, sea además conjunto. En este contexto, valoramos el espíritu de las iniciativas en la Convención Constitucional que incorporan el concepto de maritorio en la discusión, porque pone en la agenda nacional, que somos un país marítimo y que la ruta hacia la sostenibilidad necesita dar la importancia que tiene a nuestro océano. Nos alegra además la señal de que en la foto del presidente Gabriel Boric, esté el mar de fondo. Invitamos a las nuevas autoridades locales, para hacer de este desafío, una realidad.